La separación de una familia por motivo de divorcio trae consigo no solo obstáculos emocionales que superar, sino también un sinnúmero de decisiones a tomar con respecto a la división de activos. A lo largo de la disolución, usted y su cónyuge deberán determinar cómo manejar los bienes propios y gananciales, un proceso que a menudo puede llevar a disputas. Por esta razón, es importante comprender no solo qué son los bienes propios y gananciales, sino también qué papel juegan las leyes de distribución equitativa de Oregon en este proceso.
Para Principiantes, ¿Qué son los Bienes Conyugales?
Comencemos por definir qué es un bien. Un bien incluye, pertenencias personales, cuentas bancarias, vehículos, bienes raíces, inversiones, negocios, pensiones, acciones y beneficios de jubilación. Hay dos tipos de bienes que determinan qué es lo que obtendrá cada parte durante el divorcio, estos son: los bienes propios y los bienes gananciales.
Los bienes propios incluyen activos, dinero o propiedades que fueron adquiridas antes de su matrimonio. También pueden incluir herencia o presentes que se recibieron durante su matrimonio.
Los bienes y activos gananciales, por otro lado, consisten en todo lo que se adquirió durante el matrimonio. Algunos ejemplos de bienes gananciales son los activos físicos, membresías, pensiones de jubilación, cuentas bancarias y deudas. Independientemente de quien sea el propietario de la mayoría de los bienes o de la cantidad de dinero que haya aportado cada individuo, si se adquirieron bienes como pareja en matrimonio, la ley de Oregon considera el proceso de adquisición de ambos es igualitario.
Oregon es uno de los pocos estados que considera que los bienes, independientemente de cuándo o por quién fueron adquiridos, deben de ser distribuidos de manera justa. En general, Oregon coloca un "paraguas de equidad" sobre todos los activos en medio de una disolución. A lo largo del caso, cada parte tendrá la oportunidad de reconsiderar esta conjetura y presentar sus argumentos acerca de porqué y cómo deberían de distribuirse sus bienes propios y gananciales. Esta carga de la prueba va de la mano con las leyes de distribución equitativa de Oregon.
Entendido, ¿Pero Entonces, ¿Qué es Exactamente la Distribución Equitativa?
A menudo, se suele tener la idea de que cuando ocurre un divorcio, los activos se dividirán por la mitad—"parejo" es el término que viene a la mente de las personas. Este no es el caso de la distribución equitativa—equitativo no es sinónimo de igual, más bien significa justo según las circunstancias.
Las leyes de distribución equitativa toman en cuenta una serie de factores, como la duración de su matrimonio, educación y salud, la capacidad de trabajar de cada cónyuge y cualquier manutención conyugal o de hijos que se otorgará. Por ejemplo: supongamos que usted ha estado en un matrimonio durante 30 años, y decide divorciarse, el juez probablemente dividirá sus bienes propios y gananciales de manera distinta a como lo haría con una pareja que tiene solamente dos años de matrimonio.
Luego de considerar todos estos factores, un juez distribuirá los activos, ya sean propios o gananciales, partiendo de su sentido del juicio, es decir, lo que él o ella considere correcto, y no del hecho de que ambos deberían ser monetariamente igual. Dicho de otra manera, un cónyuge puede recibir más activos que el otro.
Al afrontar un divorcio, la mayoría de las parejas tratarán de resolver el asunto a través de la mediación, un proceso que no requiere de ir a la corte y le da a la pareja la oportunidad de llegar a un acuerdo mutuo bajo sus propios términos. Cuando usted se separa de su cónyuge y solicita el divorcio, es importante que evalúe sus bienes conyugales. Para poder recibir una distribución justa, necesita tener conocimiento del valor de sus bienes y activos.
Incluso si tiene problemas para llegar a un acuerdo sobre cómo deberían ser distribuidos los bienes, llegar a tantos acuerdos como sea posible durante la mediación permitirá que la situación no se le salga de las manos—cualquier cuestión en la que no se haya podido acordar nada pasará a ser responsabilidad del tribunal. Si usted y su cónyuge no han podido coincidir en cómo se deben distribuir los bienes conyugales, un juez tomará la decisión por usted, teniendo en mente una distribución equitativa.
En resumen, el sistema de distribución equitativa de Oregon no funciona de manera drástica ni utiliza ninguna fórmula, sino que es bastante flexible, ya que evalúa cada caso de acuerdo con sus circunstancias—es un sistema que dependerá mucho de los hechos.
Si está considerando divorciarse y tiene una cantidad considerable de bienes propios o gananciales, le es conveniente reunirse con un abogado y comenzar a crear un plan de acción. Es importante que cuente con un defensor experto en derecho de familia que pueda apoyarle en la lucha de una distribución justa de activos. Llame a Pacific Cascade Legal hoy al (503) 227-0200 para programar una consulta.