Es normal que al afrontar un divorcio nos sintamos sumamente abrumados—De repente, su estilo de vida, rutina y círculo social comienzan a cambiar. Como adultos, tenemos la habilidad de adaptación para sobrellevar el cambio, pero en el caso de los niños que no saben realmente qué es lo que ocurre, un cambio tan repentino les puede causar una severa angustia emocional con consecuencias negativas a largo plazo. Por esta razón, la ley de Oregon establece las órdenes de restricción de protección temporal durante los casos de divorcio, también conocido como una orden de "estatus quo".
Una idea errónea común sobre una "orden de protección temporal de restricción" es que, según el nombre, esta debería ser similar a una orden de restricción, la orden que se presenta cuando alguien ha violado el espacio o los derechos de una persona, también conocida como Orden de restricción de la ley de Prevención de Abuso familiar (FAPA). Si bien pueden sonar similares, son órdenes completamente diferentes y no están interrelacionadas.
Según Wikipedia, el término estatus quo significa el "estado actual de las cosas, particularmente en lo que respecta a cuestiones sociales o políticas". Aplicando este concepto a un divorcio de Oregon, una orden de estatus quo está diseñada para conservar el domicilio actual y el horario habitual de sus hijos, así como su círculo social y la frecuencia con la que usualmente ven a cada uno de sus padres. Básicamente, una orden de estatus quo es como una burbuja de seguridad que ayuda a salvaguardar los horarios y rutinas diarias de sus hijos, de modo que, en medio del caos del divorcio, puedan tener una sensación de estabilidad y que puedan permanecer seguros mientras se llevan a cabo los acuerdos de custodia permanente. Una vez que el decreto haya sido emitido, permanecerá vigente hasta que se decida un plan de crianza o hasta que el tribunal emita órdenes de custodia temporal. Prácticamente, una orden de estatus quo evitará que cada padre haga lo siguiente:
- Cambiar el lugar de domicilio del niño
- Interferir con la ubicación habitual y horario diario del niño
- Ocultar o esconder al niño de la otra parte
- Interferir con la comunicación y tiempo de crianza del otro padre y el niño
- Salir del estado con el niño sin un permiso por escrito del otro padre o de la corte
- Perturbar el horario y rutina diaria del niño de otra manera mientras no se hayan realizado los acuerdos de custodia y tiempo de crianza
Pero Espera, ¿Y si Quiero Responder a una Orden de Estatus Quo?
Es posible que, si uno de los cónyuges presenta una orden de estatus quo, este solicite un horario que le favorezca y que no sea precisamente igual al tiempo de crianza al que sus hijos están acostumbrados. Una orden de estatus quo tomará esto en cuenta y también considerará el tiempo de crianza, la custodia, y la ubicación de la escuela a la que sus hijos han asistido los tres meses antes de la solicitud. Por lo tanto, incluso si su excónyuge tuvo más tiempo de crianza durante las dos semanas previas a la emisión de la orden, y es justamente por eso que está presentando sus reclamos, se tendrá en cuenta no solo ese tiempo sino todo el período de tres meses.
Respondiendo a su pregunta: sí, definitivamente puede objetar el reclamo de su excónyuge. Tendrá que dar su propia versión acerca de cuál fue el horario que sus hijos mantuvieron durante esos tres meses; la evidencia física es fundamental—cualquier documento que posea y que pueda validar su contrademanda será de gran ayuda para probar su caso y revelar la verdad. Por lo tanto, si se está divorciando y cree que es posible que su ex pueda presentar una orden de estatus quo, tome cartas en el asunto y comience a guardar todos y cada uno de los documentos, recibos, fotos y otras pruebas físicas para permanecer seguro.
Como se señaló, una orden de estatus quo debe usarse como una herramienta para proteger a sus hijos y garantizar su seguridad física y emocional por encima de todo. No es un medio para ser egoístas con el tiempo que cada uno planea pasar con sus hijos o vengarse de su cónyuge. Es posible que el abuso de estas órdenes y de los reclamos falsos puedan afectar negativamente su plan de crianza en el futuro, así que verifique bien los motivos antes de presentarlos. Una orden de estatus quo puede ser complicada y, debido a la forma abrupta en la que puede presentarse, es importante que conozca acerca del tema y que le haga frente de la manera correcta. Contar con el respaldo de un abogado para que sirva de guía en el proceso y pueda abogar por sus derechos parentales y el bienestar de sus hijos es algo invaluable. Llame a Pacific Cascade Legal al (888) 981-9511 para programar su evaluación de caso hoy.